Hildegart Rodríguez Carballeira
Hildegart Rodríguez Carballeira
1914-1933
Estaba
llamada a convertirse en “la mujer del futuro”. Una educación minuciosa la
convertiría en una feminista precoz capaz de emancipar a la mujer española en unos
tiempos más que revueltos. Una heroína moderna que acabaría, de una vez por
todas, con el sometimiento de la mujer en nuestro país.
Hildegart Rodríguez Carballeira nació en Madrid (España) en 1914, y fue fruto de un experimento urdido por su madre, Aurora Rodríguez, quien se empeñó en traer al mundo a una suerte de libertadora del proletariado y del sexo femenino.
Para ello, publicitó su anhelo gestante en diferentes periódicos ferrolanos detallando las cualidades que buscaba en su contraparte masculina y respondiendo al anuncio un sacerdote de la Marina. El clérigo cumplió con los requerimientos de Aurora, y, tras un encuentro carnal de índole puramente funcional, la futura adalid del feminismo fue concebida.
Con apenas dos años, Hildegart sabía leer y con tres mecanografiaba con destreza. De ahí pasó a dominar varios idiomas y con trece ya era titulada universitaria en Derecho, convirtiéndose en la abogada más joven de España. Se matriculó en Filosofía y Medicina. Pronto se convertiría en una activa conferenciante sobre feminismo y sexología en tiempos revolucionarios en los que la trampa de la diversidad no estaba en la orden del día.
Su actividad académica fue extensa, publicó más de una docena de libros como “La rebeldía sexual de la juventud”,” Sexo y amor”, “Métodos para evitar el embarazo” y “ La limitación de la prole”, y entró en encarnizadas disputas dialécticas con aguerridos marxistas de la época.
Sus escritos interesaron a reconocidos escritores y académicos de la talla de H. G. Wells, quien, impresionado ante la capacidad discursiva de la joven prodigio, le ofreció una beca en Inglaterra.
Abogó por la separación entre deseo y procreación, se afilió a las Juventudes Socialistas y fue una prolífica colaboradora de El Socialista, órgano de expresión de un PSOE que terminó por decepcionar a la joven Hildegart, militando después en el Partido Republicano.
Hildegart publicó dieciséis monografías y más de 150 artículos en periódicos como El Socialista, La Libertad, La Renovación (el órgano de las Juventudes Socialistas) y La Tierra. Sus monografías se componen de partes propias y copias de obras de reformadores sexuales internacionales contemporáneos.
Esta prometedora trayectoria se vio frustrada cuando Hildegart contaba 18 años, el 9 de junio de 1933, cuando su madre la asesinó, temerosa de que los anhelos de independencia desviase a Hildegart del recto camino para el que había sido concebida. Aurora disparó a su hija tres veces en la cabeza y una en el corazón mientras dormía en su cama.
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